Experiencias en primera persona. Victor Herrero, IV Programa Jóvenes Innovadores en RRHH

Nos reunimos con Victor Herrero, que desde hace unos meses, es el Responsable de Recursos Humanos de la Sociedad de Apoyo que la Fundación Microfinanzas BBVA tiene en Panamá. Aquí nos cuenta cómo ha vivido esta experiencia desde el principio, antes, durante y después de su paso por el Programa Jóvenes Innovadores en Recursos Humanos que organizamos desde la Fundación Personas y Empresas. 

 

Gracias Víctor por dedicarnos este rato. Según sabemos, eres triplemente licenciado, en psicología, pedagogía y música especialidad violín. ¿cómo y cuándo decides que tu futuro pasa por la gestión de personas?  

 

El año pasado fuiste embajador de la IV edición de Jóvenes Innovadores en RRHH, ¿qué recuerdo tienes del paso por el programa? ¿qué te aportó? ¿que supuso el programa para tu carrera profesional?

 

En primer lugar me aportó vivencias personales, aprender a nivel profesional y personal de un grupo de compañeros maravilloso y de expertos que nos acompañaron a lo largo del Programa. A nivel profesional, se dio en un momento crítico, en el cual estaba a punto de finalizar la beca con la Fundación Microfinanzas BBVA sin saber con certeza qué me esperaría al finalizar mi periodo de prácticas. Eso sí, si algo tenía claro en ese momento es que mi compromiso y mi objetivo era formar parte de la FMBBVA, por lo que me tomé el programa únicamente como una experiencia de aprendizaje y una vivencia, no como una cantera de ofertas. ¡Yo sólo quería continuar en la Fundación!

 

Pese a tu corta edad, ya has tenido la oportunidad de tener varias experiencias profesionales en RRHH ¿Qué elementos fueron los que te hicieron decantar por el tercer sector, por una fundación? ¿qué valor añadido le ves al colaborar con una fundación?

 

Para ser sincero llegué a la Fundación, al sector social, por mera casualidad. En cambio ahora puedo decir que lo que más sentido le da a mi trabajo es sentir que contribuyo a generar oportunidades a muchos millones de personas que, de otra manera, tendrían grandes dificultades para progresar y para cumplir sus sueños. Sentir que aportas un pequeño granito de arena en eso… ¡es algo demasiado grande! Es parte de mi proyecto vital.

 

¿Qué reto supone la selección para una empresa que atiende actualmente a más de 1,5 millones de personas a través de sus ocho entidades en Latinoamérica?

 

Debido a nuestro modelo de Grupo, el principal reto es el hecho de tener presencia en siete países, con ocho entidades diferentes. Las culturas de cada uno de los países, las circunstancias del mercado laboral, las dimensiones, realidades y necesidades de cada una de las entidades son muy diferentes, por lo que los retos también lo son. El tipo de trabajo que realizan nuestros Ejecutivos de Microfinanzas es un trabajo hermosísimo y muy enriquecedor a nivel humano, pero es duro, ¡muy duro! Nada tiene que ver con el modelo al que estamos acostumbrados en Europa, sino que está basado en la relación, en el conocimiento del cliente y de su realidad. Eso supone ir a visitar uno por uno a los clientes en diversas ocasiones, para conocer sus necesidades, el estado y funcionamiento de sus negocios, sus sueños y aspiraciones. Para ello, nuestros colaboradores tienen que recorrer grandes distancias y, con frecuencia, visitar algunas de las zonas más vulnerables del país… ¡allí es donde más podemos ayudar! Debido a las características de esta labor, lo principal no es la formación, la experiencia previa en el puesto o el dominio de idiomas o herramientas informáticas… Lo principal es el amor por este trabajo, la motivación por ser parte del motor de cambio de la sociedad. 

 

Las microfinanzas cubren necesidades de crédito que los bancos tradicionales no abarcan ¿Qué opinas sobre el papel de las microfinanzas?

 

Teniendo en cuenta la horrible cantidad de pobreza que existe en el mundo y que el microemprendimiento ha sido la principal palanca para que muchísimas personas hayan dejado de vivir en esa situación, sólo puedo opinar maravillas de las microfinanzas. El hecho de que desde el sector microfinanciero podamos atender las necesidades financieras y dar oportunidades para soñar y para crecer a millones de personas alrededor del mundo, me parece extraordinario. La necesidad existe y estamos llegando lejos. Desde que en 2007 comenzamos nuestra actividad, ya atendemos a más de un millón y medio de personas, pero, habiendo casi 3.000 millones de personas pobres en el mundo… ¡nos queda muchísimo por hacer!

 

Mirando un año hacía atrás, a nivel profesional ¿Cómo ha cambiado tu vida desde entonces? 

 

El hecho de asumir el reto de venirme a la oficina de Panamá a ser la persona responsable del área, ha supuesto un gran reto. A nivel funcional, muchas de mis responsabilidades siguen siendo las mismas, pero lo relativo a la gestión de personas de los diez que formamos la oficina de Panamá es un reto cambiante y muy emocionante. ¡Una de las cosas más hermosas para los que amamos los Recursos Humanos! Igualmente, el trabajar en coordinación con el equipo de España pero a mucha distancia y sin el contacto diario, hace que tengas que realizar tu trabajo de forma mucho más autodirigida. Eso no siempre es fácil, ¡pero es tan motivante y retador!

 

¿Cómo te sientes en tu nueva etapa en Panamá? ¿cuáles son las mayores satisfacciones día a día en tu trabajo? 

 

A nivel personal está siendo una etapa maravillosa, por todo lo que se puede aprender de vivir una nueva experiencia como ésta, en otra cultura, de conocer un continente del que tenemos muchas cosas que aprender… ¡Una fantástica oportunidad de reencontrarse y redescubrirse! Sin duda, lo más satisfactorio de realizar mi labor desde aquí es tener más cercanía con las ocho entidades y los clientes: compartimos (casi) huso horario, me resulta fácil viajar cada vez que necesitan, puedo visitar clientes y vivir nuestra labor en primera persona con mucha más frecuencia… ¡Eso es todo un privilegio!